En 2006, el 29% de todas las muertes por accidentes automovilístico involucraron el manejo en estado de ebriedad. Aunque conducir con un nivel de alcohol en la sangre por encima de 0.08% es ilegal en todo el país, muchas personas continúan conduciendo bajo la influencia del alcohol. La ignorancia no es disculpa: exhaustivas campañas de advertencia y anuncios en los servicios públicos han tenido lugar desde los años 1980s, invitando a los conductores a no beber si van a conducir. Todas las clases de manejo hacen énfasis en la importancia de no beber y conducir.
El alcohol retarda la capacidad de reacción, reduce la inhibición, y vuelve soñoliento al conductor. Tras el volante de un vehículo, esta combinación puede resultar mortal. Conductores manejando bajo la influencia literalmente se han quedado dormidos o desmayados al volente, perdiendo el control de su auto. Los conductores ebrios a menudo tienen una actitud muy desdeñosa con respecto a las reglas de tránsito, llevando a cabo peligrosos cruces y vueltas, sin checar puntos ciegos, y generalmente conduciendo de una manera agresiva y riesgosa. Con la capacidad de reacción retardada, a menudo son incapaces de tomar medidas defensivas para evitar un accidente. Todos los departamentos de policía, abogados de lesiones personales en Florida, y autoridades a través del país concuerdan: conducir en estado de ebriedad es increíblemente peligroso.
Los accidentes por conducir en estado de ebriedad a menudo provocan graves lesiones y muertes. La gente que conduce ebria puede colisionar con objetos fijos después de salirse del camino, o pueden chocar con otros automóviles. Muchos accidentes por conducir en estado de ebriedad son de peatón-conductor bajo la influencia que a menudo no tienen el tiempo de reacción para detener o virar al ver a un peatón cruzando la calle. Los multichoques de vehículos son comunes cuando el alcohol se ve involucrado.
Quizá la verdadera tragedia de los accidentes causados por conducir en estado de ebriedad es que son completamente prevenibles. No hay absolutamente ninguna razón para que nadie conduzca después de beber. Taxis, camiones y otras formas de transporte seguro están disponibles por todo el país. Es posible registrarse en un hotel o quedarse en casa de un amigo o lugar público en lugar de conducir.
Mientras que en la mayoría de los casos, los conductores son responsables por los accidentes de conducir en estado de ebriedad, cierta responsabilidad puede recaer en otros lugares, también. Bares y restaurantes tienen la responsabilidad de dejar de servir bebidas a alguien que está obviamente intoxicado y algunos bares han sido responsabilizados por crear condiciones que permiten que se den casos de conducción en estado de ebriedad. Abogados del Sur de Florida, a menudo considerarán todas las partes responsables al evaluar un caso de manejo en estado de ebriedad.
Para las familias de las víctimas, una frustración común es que muchas personas que causan accidentes por manejar en estado de ebriedad, tienen múltiples cargos o convicciones por conducir en estado de ebriedad en sus registros. La mayoría de la gente que conduce en estado de ebriedad lo hace no sólo una vez, sino habitualmente. Esto puede ser muy difícil de entender para una familia en duelo. Un abogado personal de lesiones y calificado del Sur de Florida puede trabajar con usted para asegurar que el conductor con condenas múltiples por conducir en estado de ebriedad se vea forzado a asumir la responsabilidad por sus actos y obligado a enfrentar la sanción completa estipulada en la ley.
Si usted o un ser querido han sido lesionados en un accidente por conducir en estado de ebriedad en Hollywood, Miami, Homestead o los alrededores del área del Sur de Florida, o si ha perdido a un ser querido por culpa de un conductor que manejaba en estado de ebriedad, contacte un abogado calificado del Sur de Florida. Si necesita ayuda por un accidente de conducción en estado de ebriedad, contacte al Grupo Legal Flaxman al 1 866 Flaxman (1 866 352 9626). Nuestro equipo de abogados tiene extensa experiencia en casos de manejo en estado de ebriedad. Podemos ofrecerle sin costo ni obligación, una consulta para hablar sobre sus opciones.